Carmen nos ha recomendado que visitemos a Mabel, una amiga suya que vive en Valle Edén, un pueblito agreste en medio a unas colinas forestadas surcadas por un río. Valle Edén no es un pueblito más. A los ojos del mundo, su motivo de fama es su reclamo histórico como lugar de nacimiento de Carlos Gardel, el cantante de tango más famoso. Para nosotros, el sitio resplandece sobre todo por haber albergado un Encuentro Arco Iris.
Mabel es auxiliar de la escuela del pueblo: allí les prepara la comida a los chicos. Además, tiene una proveeduría en el camping municipal, y planea habilitar algunas cabañas para los turistas que llegan en verano. Nos damos una vuelta por la escuela, naturalmente llamada “Carlos Gardel”. Allí tenemos la oportunidad de ver de cerca las famosas computadoras portátiles del Plan Ceibal, que el gobierno ha entregado gratuitamente a cada alumno del país. Las maestras se quejan de que no estaría de más que ellas recibieran alguna capacitación para guiar a sus alumnos, que saben más que ellas, en las actividades.
¿Y qué mejor que las maestras para contarnos la historia de Gardel? A primera vista toda la atmósfera de Valle Edén –de exhuberancia casi tropical- resulta completamente ajena a un personaje como Gardel, envuelto en un aura de melancolía urbana tanguera. No menos extraño es que un pueblito agreste sin trazado urbano se trence en abierta pulseada con urbes como Buenos Aires o Toulouse, en torno al lugar de nacimiento del icono. La versión local cuenta que Gardel fue el fruto de la unión ilegítima de un terrateniente local con su cuñada, motivo por el cual envió al niño a Francia con una amiga actriz. Gardel hablaba poco del asunto, pero lo cierto es que su pasaporte emitido por el consulado argentino en Francia indica Tacuarembó como lugar de nacimiento.
La cena en casa de Mabel transcurre en el cálido ambiente de techo bajo, muy cerca del hogar encendido. Ha llegado el hijo de Mabel, quien se pasó toda la tarde buscando a una vaca perdida, también Clever y Fernando. Fernando es constructor y artesano. Lo vimos a la tarde entrenzar hojas de palma para formar un sombrero. Es él quien nos cuenta la historia de los charrúas, y su trágico fin cuando el General Rivera los embosca en el Arroyo Salsipuedes en 1831. Aparentemente Rivera citó a todos los caciques para proponerles se aliaran a él contra los portugueses, pero cuando todos habitaron un campamento compacto abrió fuego sobre ellos. Los sobrevivientes ocultaron su origen. Los vencedores incluso se llevaron a cuatro charruas enjaulados a Francia como atracción circense. Sólo hace una década surgieron grupos que reclaman sus derechos como herederos de los pobladores nativos de este suelo. Según Fernando, la hospitalidad del Uruguay contemporáneo, que nos ha deslumbrado, deriva del trato horizontal que practicaban los charruas. Cléver asiente con la paz de sus ojos celestes, y frotándose la barba albina, desde su silla en la esquina de la sala. Paula acepta el mate que viene girando y se sorprende cuando a su lado aparece, moviendo su hocico en busca de caricias, una ternera llamada Milagros.
Fernando, quien rompió su credencial para votar cuando se enteró que el mismo gobierno de izquierda votó una protección arancelaria para inversores norteamericanos, es sin dudas un lícito transmisor de estas palabras charruas:
“Hemos sobrevolado el territorio,
Hemos sobrevolado la muerte,
Hemos sobrevolado la traición,
Y aún estamos aquí.
¡Te amamos, gran pradera!
Datos prácticos:
Alojamiento en Valle Edén: aunque nosotros hicimos camping en casa de Mabel, quienes estén en aras de comodidad, la única posada es la Posada Valle Edén. También se puede visitar en el día desde la vecina Tacuarembó, aunque la paz del lugar invita a quedarse.
Hubo comentario referido a Tiatucurá y Salsipuedes, enviado -espero que, éxitosamente- vía mail. Y, agrego, hay mucho de subjetivo en lo escrito. Gardel…. ¿Hippie? ¡¡¡Una interpretación muy personal!!! Valoro expresiones valiosas: era hijo de la cuñada del Cnel Escayola, sí. y luego Berta Gardes debió «cargar» con él. Opiné acerca de la Ruta de los Charrúas y de la emboscada cuando fueron a por tierras.